Las primeras palabras de un niño suelen llegar más o menos a los 12 meses de vida, aunque cada peque tiene su propio ritmo. Aprende cómo puedes ayudarle a estimular el habla.
Aunque un bebé no comienza su etapa lingüística hasta aproximadamente los 12 meses, desde su nacimiento vive la etapa prelingüística en la que van surgiendo los precursores del lenguaje:
- De 0 a 5 meses puede emitir ruidos, gritos y gorjeos. Generalmente puede hacer sonidos cuando se le habla y es sensible al ruido.
- De 6 a 12 meses ya entiende y responde a su nombre, así como a palabras sencillas. En este momento comienzan las protoconversaciones, que son conversaciones entre el adulto y el bebé en las que este segundo interviene con sonidos o gestos. En esta etapa también comienzan los sonidos consonánticos y vocálicos como por ejemplo “ma-ma-ma” o “pa-pa-pa”. Aquí ya puede empezar a repetir sonidos.
Desde su nacimiento podemos ir observando su capacidad para responder a estímulos sonoros y descartar problemas cognitivos o auditivos que afecten a su capacidad para hablar.
El desarrollo en la etapa lingüística
La etapa lingüística comienza a partir de los 12 meses, momento en el que comenzará a pronunciar las primeras palabras con significado (como por ejemplo mamá o papá). También podrá responder preguntas sencillas con lenguaje no verbal e imitar sonidos. En este momento tendrá mucha más capacidad de entender que de hablar, y su pronunciación todavía puede ser poco clara. También podrá utilizar holofrases, que es decir una palabra que equivale a una frase (por ejemplo “agua” cuando quiere decir “quiero agua”).
Cómo estimular el lenguaje verbal de los niños
Si tu bebé está aprendiendo a hablar, pero todavía tiene algunas dificultades no te preocupes, ¡cada uno tiene su ritmo! Pero puedes ayudarle con estos ejercicios:
Si te coge de la mano para llevarte al sitio donde quiere algo
Cuando nos llevan de la mano para pedir algo, podemos ayudarles a ir dando pasos hacia el lenguaje. Primero, enseñándoles a señalar. Después, enseñándoles sonidos o gestos relacionados con la petición. Por último, enseñándole poco a poco la palabra con la que pueda pedir lo que necesita.
Si solo dice la última sílaba de las palabras
Si tiene entre 12 y 30 meses y solo pronuncia la última sílaba de la palabra (por ejemplo, dice “ca” para referirse a “vaca”), puedes hacer este ejercicio. Elige como mucho 5 palabras para trabajar durante la semana y repítelas relacionando cada sílaba con un sonido (una palmada) o con un objeto. Así:
- Va-ca (dando una palmada en cada sílaba).
- Pe-ra (señalando una pera real al decir cada sílaba)
- Co-che (tocando una pegatina con cada sílaba).
Corregir una palabra mal dicha de forma indirecta
Es conveniente no corregir directamente la palabra (“no se dice así, se dice de esta manera”), sino de forma natural e indirecta. Si él dice “guau” para referirse a un perro, le podemos decir “Sí, ¡qué bonito este perro!” en vez de usar de nuevo el “guau” que empleó él.
Dar dos alternativas
Se trata de dar dos alternativas para que conteste con la palabra. Por ejemplo, si vais a jugar con animales puedes preguntar: ¿qué prefieres, la vaca o el tigre? De modo que la respuesta sea una palabra.
Utilizar el humor
Por ejemplo, puedes utilizar la palabra “hola” de forma exagerada para saludar a todo el mundo. ¡Hola perro! ¡Hola autobús! Haz que sea divertido para que al peque le apetezca repetirlo.