Los adolescentes también necesitan pasar tiempo con sus padres, aunque en ocasiones sus ganas de ser independientes nos hagan pensar lo contrario. Descubre cómo involucrarlos en la vida familiar.
Una de las características de la etapa adolescente es que comienzan a encontrar entre sus iguales un gran apoyo emocional que hasta ese momento depositaban principalmente en la familia. Comienzan a definir cómo quieren ser de adultos (lo que supone un gran reto y una gran presión), y para ello se fijan en sus amigos, en los medios de comunicación, en las redes sociales… y también en la familia.
Que comiencen a ser más independientes no significa que dejen de necesitarnos. Tenemos que ser un pilar sólido en el que se puedan apoyar. Por eso, es importante involucrar a los adolescentes en la vida familiar.
Cómo involucrar a los adolescentes en la vida familiar
La familia sigue siendo un importante agente socializador en la adolescencia, por lo que tener una relación familiar sana tendrá importantes beneficios para los adolescentes en esta etapa tan compleja de su desarrollo. Te presentamos algunas ideas para integrar a los adolescentes en la vida familiar:
- Dales responsabilidades en casa. Las cosas de casa no se hacen por arte de magia, y asignarles tareas importantes desarrollará su autonomía, su sentido de la responsabilidad y, además, les hará sentirse parte de lo que sucede en el hogar.
- Busca hobbies que podáis practicar juntos. Patinar, jugar al bádminton, poner un huerto urbano, ver cine clásico, acudir al teatro, la fotografía… escucha sus gustos y aprovecha para convertirlos en momentos en familia.
- Cuéntales la historia familiar. ¿Has visto la serie “Cómo conocí a vuestra madre”? En ella, el protagonista cuenta a sus hijos sus historias de juventud, y es una manera de tender puentes con sus hijos. Entender las raíces ayuda a sentirse parte de la familia. Enséñales de dónde vienen, cuéntales cosas importantes de la familia y hazles ver que todo es cíclico.
- Prepara vacaciones en familia. Una forma de evitar que sientan reticencia a las vacaciones en familia es incluirles en la toma de decisiones. Dónde ir, en qué fechas… es bueno que den su opinión.
- Deja espacios para la charla en familia. Puedes aprovechar la hora de cenar para apagar la tele, dejar los móviles a un lado y hablar. Contaros unos a otros cómo os ha ido el día, si lo habéis pasado mal por algo, vuestro estado anímico y físico… lo que queráis, pero escuchando de verdad a los demás.
- Escucha su opinión sin juzgar. Si cada vez que nos van a contar algo contestamos escandalizados o ridiculizamos algo, entonces dejarán de hablar con nosotros. Lo importante para involucrar a los adolescentes en la vida en familia es tener una comunicación fluida con ellos. Puedes encontrar unos trucos para conseguirlo aquí.
- Conoce a sus amigos e invítalos a pasar tiempo en casa. Que sepan que valoramos sus relaciones de amistad y les damos importancia. Leer sobre las relaciones sociales en la adolescencia
