Despertar al niño es casi un arte. Porque hay pequeños a los que les cuesta mucho levantarse, y cada día puede ser un caos ponerse en marcha. Pero con paciencia y algunos trucos, todo será más sencillo.
Lo ideal sería que nos despertáramos cuando el cuerpo nos lo pidiera, pero la realidad es muy diferente: vivimos en sociedad y tenemos que adaptarnos a unos horarios y unas rutinas. Cuando somos adultos entendemos que no nos queda otra que salir de la cama, pero en la etapa de educación infantil es difícil encajar el momento de despertarse.
Si necesitas consejos para hacer del despertar un momento agradable, sigue los siguientes consejos.
Pasos para despertar al niño de buen humor
La rutina, nuestra gran aliada
El cuerpo se acostumbra a la rutina, y cuanto más rigurosos seamos con los horarios de cenar, ir a dormir y despertar más se acostumbrará el cuerpo de los pequeños. El cuerpo es sabio e interioriza las rutinas, y si la hora de despertar es siempre la misma, será más sencillo que lo haga de forma más automática.
Truco: haz que sea consciente de cada momento del día con preguntas como: “ya hemos cenado, ¿ahora que viene?” para desarrollar su autonomía.
Las prisas no son buenas
Despertar con poco margen suele ser motivo de disgusto, porque al madrugón se le suman las prisas. Tener tiempo para desperezarse, lavarse la cara, desayunar tranquilamente y vestirse puede hacer del despertar un momento menos estresante.
Truco: haz que aprenda un gesto al levantarse, como ponerse las zapatillas de andar por casa o coger su peluche favorito para que vaya con él a desayunar.
Serenidad en el despertar
Que te despierten a gritos, quitándote las sábanas, encendiendo la luz o subiendo la persiana es desagradable a cualquier edad. Prueba a poner una música tranquila, como si de un despertador se tratara. Acércate a la cama y avisa de que es momento de levantarse con voz dulce. Recuérdale cosas agradables que le esperan a lo largo del día (como desayunar, ir al parque o ver a sus amigos).
Truco: ¿y si utilizas siempre la misma canción de despertar? Así cuando la escuche, sabrá que es el momento de levantarse.
Dormir las horas suficientes
¿Sabías que los niños de 1 y 2 años duermen de media 13 horas diarias? De los 3 a los 5 años este número va bajando a 10-12 horas. Es necesario que descansen lo adecuado, por lo que hay que adaptar la hora de irse a dormir para que tengan margen suficiente de descanso. Cuidado con las siestas, si se hacen muy largas o demasiado tarde puede afectar en el sueño nocturno.
Truco: calcula el horario de dormir de tu peque. Si, por ejemplo, entra en la guardería a las 9 y para llegar hay tiempo hay que despertarse a las 8, sería conveniente que se fuera a dormir a las 20:00 o a las 20:30.