Cocinar con los niños es divertido, les sirve para aprender muchas habilidades y, además, pasamos tiempo de calidad en familia. ¿Te apuntas? ¡Manos a la masa!
Se puede comenzar a cocinar con los niños desde que son muy pequeños. Solo hay que entender las habilidades que tienen en ese momento y darles tareas que estén a su alcance, garantizando siempre su seguridad.
Por ejemplo, desde los 3 años ya pueden remover, amasar o lavar alimentos. Con 5 ya pueden untar, verter masas en moldes o preparar brochetas. Y con 7, 8 y 9 años estarán preparados para decorar postres, seguir recetas sencillas e incluso emplatar.
Por supuesto, tenemos que supervisar cada paso, especialmente si hay utensilios peligrosos cerca o tenemos el horno o la sartén encendidos.
Ventajas de que los niños aprendan a cocinar
A través de la cocina podemos enseñar una gran cantidad de habilidades a los peques:
- Psicomotricidad fina. Es decir, consiguen dominar su movimiento corporal, aquel para el que se requiere concentración y precisión.
- Motivación. Saber que lo que está cocinando será luego comido hará que se esfuerce por conseguir un buen resultado.
- Responsabilidad. Tomarán conciencia de la importancia de los propios actos, y entenderán el esfuerzo que hay detrás de las tareas cotidianas.
- Concentración. Cocinar requiere estar atento a lo que está pasando, y cualquier despiste puede hacer que el resultado final no sea el esperado.
- Creatividad. La cocina es mucho más que seguir instrucciones al pie de la letra. La cocina permite desarrollar la creatividad, experimentar y divertirse.
- Satisfacción personal. Sentirán que su esfuerzo ha tenido una recompensa (disfrutar después de la comida o ver cómo la familia también la prueba).
- Organización. Para cocinar no podemos tener la cocina hecha un desastre, es mejor tener todo colocado y en orden.
- Tolerancia a nuevos alimentos. Muchos niños y niñas tienen neofobia, es decir, miedo a probar nuevos alimentos. Si les damos la oportunidad de cocinar, verán esos alimentos con otros ojos y quizá les apetezca probarlos.
- Diversión. Cocinar es un pasatiempo muy entretenido.
Para cocinar con los peques de la casa se requiere de tiempo, paciencia y colaboración. Pero merece la pena el esfuerzo.
Ideas para cocinar con tus hijos
- Sándwiches divertidos. Preparar un sándwich parece bastante fácil, pero ofrece muchas posibilidades. Lo primero, la combinación de sabores. Podemos tener preparados una gran cantidad de ingredientes para que vayan probando cómo combinan entre ellos y hagan sus propias elaboraciones. Además, podemos añadir una variable creativa si decoramos con caras el exterior de los sándwiches.
- Masas y pasteles con hojaldre. El hojaldre es una masa fácil de manipular y que ofrece un resultado muy profesional.
- Bizcochos caseros. Una forma sencilla de comer menos alimentos procesados es que aprendan a hacer bizcochos.
- Pizza. Se puede hacer la masa o comprarla ya hecha (mejor lo primero) y probar distintas combinaciones de sabores.
- Brochetas. Colocar ingredientes en un palo es muy divertido, y podemos aprovechar para incluir verduras y frutas.
- Decoración de galletas. Una bonita manera de desarrollar la creatividad.
